Según la ley, si un trabajador no informa al empleador que tiene una incapacidad, y no las acredita mediante órdenes médicas, podría ser aplicado lo establecido por el numeral 4° del artículo 60 del Código Sustantivo del Trabajo, que dice que está prohibido a los trabajadores faltar al trabajo sin justa causa de impedimento o sin permiso del empleador, excepto en los casos de huelga. Sin embargo, para los empleadores es difícil cuando un empleado falta mucho, y especialmente si el trabajador es muy bueno en sus labores. ¿Qué hacer? Te daremos algunas claves:
Es importante no entrar en conflicto directamente. Averigua con sus compañero de trabajo directos los motivos por los que podría estar faltando el trabajador (puede ser algún problema no informado, por ejemplo). Si nadie sabe el motivo, llámalo directamente para consultarle el motivo de sus constantes ausencias.
Intenta mantenerte en calma y con la mente abierta, ya que la persona puede estar alterada por algún problema personal o con algún compañero de trabajo. Recuérdale que su labor en la empresa es importante y haz que se ponga en tu lugar. Además, ofrécele tu ayuda en lo que necesite y escúchalo realmente.
Si has podido comunicarte con tu empleador, mantén abierto el diálogo. Comunícate seguido para mantenerte al tanto y saber cuándo volverá a retomar sus labores habituales.
Muchas personas, por falta de experiencia o confianza con sus empleados, se dejan estar en la cuestión del asesoramiento legal. No te dejes estar, ya que es importante que estés asesorado legalmente, ya sea ante un conflicto con el trabajador o un despido por falta injustificada.